Ruente - Renedo - Ucieda

Ruente - Viaña  versión 2.0. Me explico. 

El otro día abortamos la ruta a realizar por Ruente hasta Ucieda pasando por Viaña por que amenazaba agua y en abundancia. Yo al final como tenia que pasar por la zona y como el día despejó, la  realicé solo. Pues bien esta semana lo comenté con mi amigo Javi y  le debió de gustar tanto que a las 10:00 de la mañana estábamos  dando pedales.

Dejamos el coche en Ruente y por la carretera general vamos hasta Sopeña. En este punto seguimos la ruta de los Foramontanos hasta Renedo de Cabuerniga donde nos desviamos camino de Viaña.

Hemos dejado atrás varios pueblos como Valle, Teran y Selores, con sus correspondientes rincones de paz y tranquilidad.

Comienza la subida hasta Zarzamorosa. Quitando los150 primeros metros que son de hormigón y una pendiente muy alta el resto es una pista es muy ciclable. Empezamos rodeados de robles y terminamos metidos en la niebla.

Seguimos cresteando por los diferentes picos y en algún caso tiramos de gps para orientarnos ya que la niebla nos esta acompañando durante toda esta parte del recorrido y encima nos impide ver todos los valles que nos rodean.

Justo cuando llegamos al techo de nuestra ruta, parece que empieza a despejar y vemos algunos picos. Desde Peña Sagra hasta el pico Obios.

Llegamos a las proximidades del pico Tordías y comenzamos el descenso camino de Ucieda.

Poco mas abajo del desvío que nos llevaría al Cueto de la Forcada tomamos una pista a nuestra derecha que se supone que nos baja hasta las proximidades de la campa de la Casa del Monte.

Al principio es una pista muy "descarnada" con mucha piedra suelta pero a medida que nos acercamos al bosque la cosa cambia de color.

Empezamos a ciclar metidos en bosque por un sendero que nos permite disfrutar de todo el entorno sin tener que ir muy pendiente de por donde ponemos la bici.

Descendemos hasta cruzarnos con el sendero de "La ruta de los puentes".

Cogemos camino de "Las Rozas" y seguimos descendiendo. Robles, praderas y alguna zona de elechos es lo que nos encontramos a nuestro paso.

El descenso esta siendo tan tranquilo y sin tanta pendiente, que nos preguntamos en que punto empezaran las fuertes rampas  de descenso.

Y llegó ese punto. A partir de aquí trialera y reflejos al máximo. Un solo punto donde no nos atrevemos a bajar subidos en la bici, pero el resto lo disfrutamos al máximo.

Se acabó el descenso y salimos justo al sedero adaptado para personas invidentes. Una iniciativa impresionante donde todas estas personas pueden ir guiadas por una barandilla y con sus correspondientes carteles en braille, así como tocar los diferentes tipos de maderas que existen en las proximidades.

Ya de regreso camino de Ucieda, vamos comentando el precioso descenso. Nos ha gustado tanto que parece que es el único tema del día.

Nos desviamos camino de Gismana, para llegar a Ruente y en el nacimiento de la Fuentona hacemos nuestra ultima foto del día.

Impresionante RUTA que tendremos que repetir.